Amos V: Petronas, el POV con mayúsculas

¿Finiquitando un artículo?

 No voy a desvelaros, por supuesto, su nombre real, que podréis hallar facilmente revisitando viejas páginas de discusión, listas de correo caducas o mensajes anónimos en el café torpemente ocultados de la luz pública por alguno de sus atentos criados. Muchas han sido las ocasiones en que la identidad real de Petronas (foto del carcamal incluida) ha saltado a la luz pública, y el lector avispado podrá hacerse una idea muy cercana a su verdadero perfil, del todo opuesta a esa visión del abnegado héroe wikipédico que sus obtusos admiradores neardentalensis (y sus serviles chuchos) pretenden imponer.

Lo importante, digo, no es su nombre real, sino que Petronas – digámoslo crudamente- no es más que un gris enchufadillo del PSOE valenciano dedicado en cuerpo y alma a reescribir y glorificar, en horario de oficina, la memoria histórica del partido político que le da de comer. Petronas es, quien en mor de la objetividad, vigila y manipula a su gusto artículos como: Partido Socialista Obrero Español,  Francisco Javier León de la Riva, Francisco Camps, Huelga de los controladores aéreos  y Caso Gurtel (obsérvese como en este último ejemplo, recupera la referencia a un artículo de opinión de un blog;  Éste, en cambio, lo borra), artículos en propiedad en los que la más leve modificacion habrá de pasar por la aprobación de nuestro preboste o de algunos de sus fieles esbirros (prueba si no, lector incrédulo, a cambiar una sola coma de aquí, y verás quién aparece).

Las reversiones "políticas" que realiza este alto representante para la pureza del realismo PSOEvitico en la wikipedia suelen incluir además la amenaza por sistema: César Vidal, Guerra Civil, etc. Gusta, luego, de mandar fusilar a sus contricantes al amanecer, recurriendo para ello al brazo ejecutor de sus bibliotecarios neardentalesis, cuando no directamente a su mano derecha Ecemaml. Consciente de la importancia de mantener cierta dignidad y aparencia de legalidad, Petronas prefiere ejercer su influencia privadamente a través del correo electrónico, pero a veces, como acontece con los líderes que se hartan de las consignas del día, deja a un lado sus sutiles ardides para dirigirse cual despótico Nerón directamente a las páginas de discusión de sus criados, siempre ansiosos de obedecer sus dictámenes.